jueves, 31 de enero de 2013

No tenía miedo a que se acabara el mundo en 2012, tenía miedo a que todo siguiera igual…


La necesidad de ampliar nuestros conocimientos es una parte positiva para entender el timo de la crisis. Se imaginan que vinieran de otro planeta a echarnos una mano. No veo fácil solución. Se imaginan una re-evolución donde tecnológicamente cambiemos las energías que mueven el mundo de manera libre y en pro de los humanos. ¿Cómo es posible que hablemos por teléfono gratis con Estados Unidos a través de Skype y las compañías eléctricas, transporten la electricidad por cable en el siglo XXI . Quién se cree, con tantísima tecnología que dejen pasar hambre y necesidad a tanta gente en el mundo. Cómo es posible que Nicola Tesla inventara la solución energética del planeta tierra y todavía estemos inmersos en la polaridad del PSOE - PP y buscando culpables?. Pues sí, la necesidad de ampliar nuestros conocimientos forma parte de salir de esta supuesta crisis. Mi objetivo, en esta ocasión, es compartir información que nos haga reflexionar.

¿ Creen Ustedes que el inmenso cielo, con millones de estrellas, se hizo a placer de los habitantes de esta tierra ? “Pues claro que sí” –podrían responder. “Es el único planeta habitado del Universo”. “A mi juicio hay un 99,9 por ciento de posibilidades de que exista la vida inteligente en algún otro planeta”. Esta respuesta no viola ningún principio religioso. He conversado y compartido información con diferentes personas suficientemente ilustradas. Personas con una sólida vida espiritual. Es obvio que para compartir la amistad no hay que compartir todas las creencias. Una entidad europea de conocida solvencia sobre el tema, expresa textualmente: “Podría haber miles de millones de planetas no mucho más grandes que la Tierra, orbitando débiles estrellas en nuestra galaxia, de acuerdo con un equipo internacional de astrónomos. “Este número estimado de ’súper-Tierras’ -planetas con hasta diez veces la masa de la Tierra- se basa en detecciones ya realizadas y luego extrapoladas para incluir la población de las llamadas ‘estrellas enanas’ de la Vía Láctea. “‘Nuestras nuevas observaciones con Harps arrojan que alrededor del 40% de las estrellas enanas rojas tienen una ’súper-Tierra’ orbitándola en su zona habitable, donde puede existir agua en estado líquido en la superficie del planeta’, esto lo dijo Xabier Bonfills, jefe del equipo del Observatorio de Ciencias del Universo de Grenoble, Francia, no lo digo yo.

La lectura de estas noticias demuestran la posibilidad y la necesidad de ampliar nuestros conocimientos, hoy fragmentados y dispersos. Quizás nos lleve a posiciones más críticas acerca de la superficialidad con la que abordamos problemas culturales, materiales y espirituales. A mí no me cabe la menor duda de que nuestro mundo cambia mucho más aceleradamente de lo que somos capaces de imaginar. Mi temor era en el 2012 que las cosas siguieran igual, imposible, todo tiene que cambiar y nosotros somos ese todo. Salud y calma arcenses, o no salvamos todos o no se salva nadie.

Antonio Ortiz. Concejal y portavoz de Ven-T en Arcos de la Frontera. Enero- 2013



martes, 29 de enero de 2013

El triunfo de los mediocres

Quienes me conocen saben de mis credos e idearios. Por encima de éstos, creo que ha llegado la hora de ser sincero. Es, de todo punto, necesario hacer un profundo y sincero ejercicio de autocrítica, tomando, sin que sirva de precedente, la seriedad por bandera.

Quizá ha llegado la hora de aceptar que nuestra crisis es más que económica, va más allá de estos o aquellos políticos, de la codicia de los banqueros o la prima de riesgo.

Asumir que nuestros problemas no se terminarán cambiando a un partido por otro, con otra batería de medidas urgentes, con una huelga general, o echándonos a la calle para protestar los unos contra los otros.

Reconocer que el principal problema de España no es Grecia, el euro o la señora Merkel.

Admitir, para tratar de corregirlo, que nos hemos convertido en un país mediocre.

Ningún país alcanza semejante condición de la noche a la mañana. Tampoco en tres o cuatro años. Es el resultado de una cadena que comienza en la escuela y termina en la clase dirigente.

Hemos creado una cultura en la que los mediocres son los alumnos más populares en el colegio, los primeros en ser ascendidos en la oficina, los que más se hacen escuchar en los medios de comunicación y a los únicos que votamos en las elecciones, sin importar lo que hagan, alguien cuya carrera política o profesional desconocemos por completo, si es que la hay. Tan solo porque son de los nuestros.

Estamos tan acostumbrados a nuestra mediocridad que hemos terminado por aceptarla como el estado natural de las cosas. Sus excepciones, casi siempre, reducidas al deporte, nos sirven para negar la evidencia.

- Mediocre es un país donde sus habitantes pasan una media de 134 minutos al día frente a un televisor que muestra principalmente basura.

- Mediocre es un país que en toda la democracia no ha dado un solo presidente que hablara inglés o tuviera unos mínimos conocimientos sobre política internacional.

- Mediocre es el único país del mundo que, en su sectarismo rancio, ha conseguido dividir, incluso, a las asociaciones de víctimas del terrorismo.

- Mediocre es un país que ha reformado su sistema educativo tres veces en tres décadas hasta situar a sus estudiantes a la cola del mundo desarrollado.

- Mediocre es un país que tiene dos universidades entre las 10 más antiguas de Europa, pero, sin embargo, no tiene una sola universidad entre las 150 mejores del mundo y fuerza a sus mejores investigadores a exiliarse para sobrevivir.

- Mediocre es un país con una cuarta parte de su población en paro, que sin embargo, encuentra más motivos para indignarse cuando los guiñoles de un país vecino bromean sobre sus deportistas.

- Mediocre es un país donde la brillantez del otro provoca recelo, la creatividad es marginada –cuando no robada impunemente- y la independencia sancionada.

- Mediocre es un país en cuyas instituciones públicas se encuentran dirigentes políticos que, en un 48 % de los casos, jamás ejercieron sus respectivas profesiones, pero que encontraron en la Política el más relevante modo de vida.

- Es Mediocre un país que ha hecho de la mediocridad la gran aspiración nacional, perseguida sin complejos por esos miles de jóvenes que buscan ocupar la próxima plaza en el concurso Gran Hermano, por políticos que insultan sin aportar una idea, por jefes que se rodean de mediocres para disimular su propia mediocridad y por estudiantes que ridiculizan al compañero que se esfuerza.

- Mediocre es un país que ha permitido, fomentado y celebrado el triunfo de los mediocres, arrinconando la excelencia hasta dejarle dos opciones: marcharse o dejarse engullir por la imparable marea gris de la mediocridad.

- Es Mediocre un país, a qué negarlo, que, para lucir sin complejos su enseña nacional, necesita la motivación de algún éxito deportivo.

ANTONIO FRAGUAS DE PABLOS (FORGES)

lunes, 28 de enero de 2013

La generación que construyó España

"¿Quiénes son los pobres? Los nietos de los ricos". (Aforismo castellano)

Cuando analizas lo que ocurre en una empresa o una sociedad, debes buscar las causas que provocan su situación, porque sólo trabajando sobre las causas, puedes cambiar los efectos. Y no tengo ninguna duda de que una de las principales causas de la prosperidad que vivimos en los años pasados fue la actitud de la generación de nuestros padres, y una de las principales causas de la crisis, es haber perdido esa actitud.

Recuerdo que hace años, un empresario brillante que viajó a China para hacer negocios, me comentaba: "China va a ser imparable. Cuando llegas allí el ambiente te recuerda la España de los años 70. Todo el mundo quiere trabajar mucho, ahorrar, comprarse su casa, su coche, que sus hijos vayan a la universidad". Cuando una generación está así centrada, no hay quien la pare. Este pensamiento me hizo reflexionar entonces y me ha vuelto a la memoria al contemplar a las tres generaciones que convivimos.

Mis padres tienen en torno a 70 años, y siempre han sido un ejemplo de trabajo, honradez, austeridad, previsión y generosidad. Pertenecen a una generación que, como dice mi padre, les tocó el peor cambio: de jóvenes trabajaron para sus padres y de casados para sus hijos.

Son gente que veían el trabajo como una oportunidad de progresar, como algo que les abría a un futuro mejor, y se entregaron a ello en condiciones muy difíciles. Son una generación que compraba las cosas cuando podía y del nivel que se podía permitir, que no pedía prestado más que por estricta necesidad, que pagaban sus facturas con celo, y ahorraban un poco "por si pasaba algo", que gastaban en ropa y lujos lo que la prudencia les dictaba y se bañaban en ríos cercanos, disfrutando de tortillas de patata y embutidos, en domingos veraniegos de familia y amigos.

Y tan sensatos, prudentes y trabajadores fueron, que constituyeron casi todas las empresas que hoy conocemos, y que dan trabajo a la mayoría de los españoles.

Sabían que el esfuerzo tenía recompensa y la honradez formaba parte del patrimonio de cada familia. Se podía ser pobre, pero nunca dejar de ser honrado.

La democracia significaba libertad y posibilidades y seguir viviendo en armonía y respeto.



Y cometieron los dos peores errores imputables a esa generación:

1) "Que mis hijos no trabajen tanto como trabajé yo".

Nos cargamos la cultura del esfuerzo y del mérito de un plumazo, convirtiendo el trabajo en algo a evitar.

2) Como tenemos unos ahorrillos, hijo, tu gasta, que para eso están tus padres".

Con lo que mi generación empezó a pensar que el dinero nacía en las cuentas corrientes de sus padres, que daban la impresión de ser inagotables y que los bancos eran unas fuentes inagotables de hipotecas, rehipotecas y contrarehipotecas.

Y entonces, eclosionó nuestra generación (yo soy del 67). La generación de los nuevos ricos, la generación de "los pelotazos", del gasto continuo, de la especulación, de la ingeniería financiera, de la exhibición del derroche, la de lo quiero todo y lo quiero ya, la de "papá dame".



Y todos nos volvimos ricos (en apariencia), todos nos convertimos en gastro-horteras. ¿Conocéis a alguien que se atreva a comer un bocata de chorizo? Le corren a gorrazos por paleto. Ahora hay que comer hamburguesas deconstruidas al aroma de los almendros al atardecer. ¿Y qué decir del

vino? Pasamos del Don Simón con Casera, al Vega Sicilia sin fase de descompresión. El vino ya no está "bueno", ahora tiene matices a fruta del bosque, con un retrogusto alcohólico, que adolece de un cierto punto astringente, con demasiada presencia de roble. Esto, por supuesto, a golpe de docenas de euro, que para ser un "enterao" hay que pasar por taquilla. ¡Y es que pocas cosas cuestan tanto, como ocultar la ignorancia!



Somos la generación de "endeudarse para demostrar que eres rico". Increíble pero cierto.



- ¿Sólo debes 500.000? Es que eres un cutre. Mira, nosotros debemos ya 2.000.000 y nos están estudiando una operación por otros 2 más.



- Vosotros sí que sabéis sacar provecho al sistema ¡Ojalá yo algún día pueda deber esas cantidades. ¡Cuánto envidio tus préstamos!



En Alemania no daban abasto a fabricar Mercedes, Audis, BMW para los españoles.

Irrumpió Europa en nuestras vidas y llegó en forma de mega infraestructuras que producían mega comisiones para todos los involucrados. ¡Viva el cazo! ¡Viva el yerno del Rey! ¡Que se besen los padrinos! Además llovían las subvenciones, nos daban una fortuna por plantar viñas y luego a los dos años otra fortuna por arrancarlas. Que llegaba un momento que no sabías si tenías que plantar o arrancar. A propósito, ¿Qué toca este año?

Si algún "tarao" dice que hay que parar esto, se le lapida y "que no pare la fiesta". Por supuesto que todos estamos de acuerdo que esto es imposible que se sostenga, pero hay que empezar a recortar por el vecino, que lo mío son todo derechos esculpidos en piedra en la sacrosanta constitución.

De la siguiente generación mejor no hablar (lo dejaré para otro post). Esa es la generación que dice el aforismo que será pobre por ser nieta de ricos.

Si somos incapaces de volver a los valores con los que se construye una sociedad sostenible, nos hundiremos, eso sí, cargados de reivindicaciones.

En mi casa siempre he tenido un ejemplo vivo de cordura, honradez y esfuerzo. Y no han sido menos felices que nosotros. Los psiquiatras, de hecho, dicen que al revés, que han sido bastante más. Debe ser que la sencilla tortilla, el melón fresquito, comprar el sofá cuando se podía, poner las cortinas cosidas por nuestra madre, con ayuda de la abuela, trabajar y echarle huevos para emprender (aunque no lo llamaban así) no debía ser mala receta.

Desde aquí quiero dar las gracias a mis padres y a toda esa generación que nos regalaron un país cojonudo, que nos hemos encargado de arruinar (entre todos, que todos hemos aplaudido la locura), y que sólo con que nos descuidemos un poquito más, le vamos a dejar a nuestros hijos un protectorado chino, donde serán unos esclavos endeudados y tendrán unas historias legendarias sobre la prosperidad que crearon sus abuelos, empeñaron sus padres y son incapaces de imaginar los nietos.

Estamos a tiempo de cambiarlo, pero cada vez tenemos menos. Podemos encontrar maestros en casa.

lunes, 21 de enero de 2013

“Aunque estuviera seguro de que este país fuera directo al fracaso, sembraría mañana un olivo.


“Merece la pena podar el olivar con todas sus consecuencias”.


Aunque algunos sobrepasemos la indignación, esta guerra será beneficiosa para todos, pues sólo van a caer mafiosos de una y otra facción. Tres años ya desde que Ven-T invitaba a la reflexión: la derecha y la izquierda PPSOE, un engaño para tenernos distraídos, Barcelona-Real Madrid.

Tiene lógica cuando estamos en guerra. Los efectos ya son devastadores. El PP se desangra a velocidad imparable. El sistema se cae en pedazos, un puzle que es virtual y que por mucho que queremos, no encontramos las piezas. Un país gobernado por corruptos, un gallinero cuidado por zorros. Que nadie se crea ninguna de las falsas referencias éticas de los contendientes peleando en la arena, ni los temblores de manos, que son en realidad temblores de piernas. Ya nadie cree a estos políticos que nadan en su propia corrupción moral y en sus vómitos, sin vergüenza alguna. Veremos a Esperanza Aguirre con golpes de pecho y a Rubalcaba frotándose la calva. Ya sé que no estamos ante un intento de acabar con la corrupción, sino una batalla política para ver quien se sienta en el poder. La baraja se ha roto y eso nos beneficia. Con seis millones de parados, sin duda vamos a compás con lo que pasa a nivel financiero internacional. Un verdadero lodazal de donde no podemos salir sin dar un golpe en la mesa. ¿Quién tira la primera piedra?. Los 22 millones de euros de Barcenas en Suiza, son para una “combiá” como decimos en Andalucía, la cantidad real nunca la sabremos. Ni Gürtel, ni Malaya, ni Campeón, ni Eres, ni Nós, ni Puyoles o couyones. A Rubalcaba no le gustan los Faisanes, le producen problemas gastrointestinales y necesita de urgencia terapia de colon.

Mariano Rajoy está acabado: vivió en la corrupción con Aznar y la heredó. La cortó, pero ya demasiado tarde. Cobró, por supuesto, los sobres, como todos. Esta guerra ya es beneficiosa. De todo lo que está aconteciendo saldrán alternativas. Solución: Una justicia independiente y una justa valoración de los ciudadanos en las urnas las próximas elecciones. Sin olvidar que hay que cambiar primero la ley electoral , si es que sobrevivimos dos años más con este sistema timocrático sin meter en la cárcel a unos cientos o miles. Todos tenemos la culpa, no saquemos balones fuera. Por supuesto que la crisis irreversible de este sistema basado en la corrupción no tiene solución ni futuro.

Para terminar como empecé: “Aunque estuviera seguro de que este país se fuera por el precipicio de la Peña de Arcos, sembraría mañana un olivo”. Salud y calma, o nos salvamos todos o no se salva nadie.

Antonio Ortiz. Concejal y portavoz del grupo municipal Ven-T

¿ Por qué firma VenT ante notario ?

Qué buscan con esta acta notarial ??