Crónica Taurina. Diario de campo de Antonio Ortiz

Manuel Barea “El Arqueño”: 

“Un torero de Arcos en el exilio”

Este pasado día miércoles 13 de Agosto, en la finca del expresidente del Sevilla Club de fútbol, González de Caldas, el torero de Arcos, una vez más, se encerró con un toro de encaste Morube.

El toro, un cinqueño, no sirvió, sentenció negativamente la tarde. La plaza de tientas, al reclamo de El Arqueño, lo paró con lances de rodilla. No termino de aceptar como este chaval se juega la vida, por otro lado entiendo que no le queda otra para seguir adelante. Un toro ofensivo y bien hecho, no dio juego a nuestro torero por parado e inútil. La lidia del Arqueño necesita ya, con el nivel de preparación y mentalización,  toros más encastados. Toro complicado, por concluir, sin que se nos enfade el ganadero. Buenas hechuras; generosidad en las defensas. Pero nada más. Con ese material había una consecuencia inmediata: los de siempre se frotaban las manos para añadir estrofas a su mensaje apocalíptico y enredarse en su bucle melancólico; los verdaderos aficionados que nos encontrábamos allí, apreciamos la disposición del torero y una tanda de bandera.

En medio de ese panorama, poco más se puede contar. El Arqueño se estiró a la verónica al recibir al toro.
El diestro de Arcos, escenificó con ese animal, lo máximo como pueden comprobar en la foto. Más que una foto, es un cartel de toros para la feria de San Miguel de Arcos de la Frontera. 


No le quedó más remedio que abreviar. ¿Qué quieren que les cuente?

Sólo quedaba echarlo abajo y así lo hizo. El Arqueño, está matando como nunca lo he visto en 10 años.  Pero como es habitual, las hadas andaban pendientes de este matador arcense  que volvió a sortear otro animal con dignidad y valentía. El pescado está más que vendido. El torero, como he dicho otras veces, está preparado y más que listo, que queremos más de un matador de toros, que de momento, esta temporada  lo han dejado en el exilio. No será por mucho tiempo. Pronto matará dos toros más a puerta cerrada. Ni un servidor de ustedes, Antonio Ortiz Ordóñez, ganadero y aficionado a las crónicas taurinas, ni Antonio Ruiz Espartaco, se lo quieren perder. Salud y calma que todo llegará...

El Arqueño, González de Caldas y Antonio Ruiz Espartaco